Los mejores tratamientos para tu piel

Adrián Alegre Sánchez, dermatólogo en Madrid, es un profesional madrileño que estudió Medicina en la Universidad Autónoma de Madrid y realizó alguna estancia en el extranjero (Cardiff, en Gales, y Puerto Rico). Al finalizar la carrera de Medicina decidió especializarse en Dermatología por lo amplio de esta especialidad (toca aspectos clínicos, aspectos quirúrgicos y tiene una amplia parte que enlaza con la Medicina Estética).

Realizó la especialidad en el Hospital Universitario Ramón y Cajal, con posterior formación en Dermatología Estética a través del Master de la Universidad de Alcalá de Henares. Desde siempre, Adrián ha estado muy interesado en el campo de los láseres en Dermatología, ya que le parece algo increíble el poder solucionar problemas importantes de la piel simplemente con una fuente de luz como herramienta y evitando efectos secundarios de las cirugías o los fármacos.

La subespecialización en cicatrices surgió durante una estancia en el centro Beckman Laser Institute de Irvine, California, que realizó el último año de su residencia. Allí tuvo la oportunidad de comprobar cómo mediante la combinación de láseres se podía mejorar mucho la cicatrización y pudo participar activamente en distintos trabajos de investigación en este campo. Eso despertó su interés en el ámbito de las cicatrices y le motivó a importar y potenciar esos conocimientos dentro de sus centros de trabajo en Madrid.

Actualmente, Adrián Alegre trabaja en el Grupo de Dermatología Pedro Jaén, que integra a distintos dermatólogos y otros especialistas trabajando en equipo pero con unidades de especialización muy marcadas. De esta forma se ofrece a los pacientes una atención muy personalizada a su problema en concreto y también supone un extra de estímulo para los médicos.

Dentro de la Dermatología, Adrián Alegre está más enfocado al área de Dermatología Reparadora en el campo de la Cicatrización y reparación de cicatrices patológicas, principalmente mediante combinación de láseres dermatológicos en cicatrices recientes y antiguas de distinto origen. Esto abarca desde cicatrices extensas por quemaduras que suponen un auténtico reto médico hasta problemas más estéticos pero que pueden tener un gran impacto en las personas como las cicatrices por acné. 

¿Cuáles han sido los mayores aprendizajes en vuestros años de trayectoria en el campo de la dermatología y especialmente en el tratamiento del acné?

Los mayores aprendizajes siempre se obtienen de los propios pacientes. El acné es una patología que abarca desde lo meramente estético hasta auténticos cuadros graves con lesiones profundas y cicatrices desfigurantes en zonas tan relevantes como la cara o el cuello.

Muchas veces son pacientes con problemas de autoestima por acarrear este problema durante años por lo que, con el tiempo he aprendido a poder ofrecerles tratamientos que sean eficaces pero también ofreciendo expectativas realistas y que requieren un esfuerzo de constancia por su parte.

En muchas ocasiones se tratan de vender remedios milagrosos y 100% eficaces para un problema complejo como es el acné y las cicatrices derivadas de éste. Creo que en este campo, la honestidad por parte de los médicos es importante y los pacientes lo agradecen siempre.

¿Cuáles son los productos y el equipamiento que requerís para llevar a cabo vuestro trabajo?

En mi caso se requiere un equipamiento de alta tecnología, ya que incluye distintos tipos de láseres dermatológicos (láseres vasculares, láseres de remodelado ablativos y no ablativos), técnicas quirúrgicas y de regeneración de tejidos como el plasma rico en plaquetas y los injertos de grasa. El trabajar en un gran Grupo de Dermatología con posibilidad de acceso a todas estas técnicas es un privilegio.

¿A qué edad es conveniente emprender un tratamiento para el acné juvenil?

El acné juvenil o del adolescente, como tal suele iniciarse entre los 11-13 años en las niñas y los 12-15 años en los niños, debido al desarrollo puberal. Es importante que el tratamiento sea precoz, ya que de esta forma se va a frenar la evolución de formas de acné más inflamatorio, con más riesgo de producir cicatrices para toda la vida.

¿Qué sugerencias dais a vuestro clientes en cuanto a su alimentación para superar problemas de orden dermatológico como el acné?

Es importante señalar que el acné NO es un problema de alimentación. Sí existen situaciones en las que puede empeorar por algunos tipos de comida, pero, principalmente es un problema médico de la glándula de grasa de la piel (glándula sebácea) que está hiperactiva por un estímulo hormonal. 

Aún así, siempre recomendamos llevar una dieta equilibrada, baja en grasas saturadas y alimentos muy procesados con mucha carga glucídica (bollería industrial, fritos, etc.). También es conveniente reducir el consumo de lácteos.

Dr. Adrián Alegre Sánchez

Dermatología Médico-Quirúrgica

dralegresanchez@gmail.com

www.dermalegre.com

Los cuidados más avanzados y la tecnología más vanguardista para cuidar de tu piel

Adrián Alegre Sánchez desempeña su labor médica como experto en Dermatología dentro del grupo de Dermatología Pedro Jaén, integrado por un equipo de grandes profesionales experimentados y especializados en las diversas áreas de esta especialidad médica. Mediante el uso de las tecnologías más avanzadas y que han demostrado una eficacia clínica contrastada, se abarcan diversos problemas de la piel utilizando los tratamientos más eficientes y siempre elaborando un itinerario personalizado para hacer el seguimiento más minucioso de la evolución de cada paciente.