Artes marciales para forjar un carácter más sano
Danilo Jude Bardisa, experto e instructor de artes marciales en Madrid, es dueño de la Escuela de Artes Marciales de Madrid y el primer occidental en proclamarse campeón del mundo en Japón de Kenpo Kai en casi 30 años. Aunque nació en Nueva York, ha vivido casi toda su vida en España. Su carrera deportiva la ha desarrollado con base en nuestro país y ahora es uno de los competidores internacionales de Kenpo que se encuentra en los primeros puestos del ránking mundial de esta disciplina.
Además de por sus logros deportivos se le conoce por ser el fundador de los primeros campamentos de artes marciales y desarrollo del carácter en España y por ser el responsable del departamento de Kenpo Kai de Madrid, encargado de seguir transmitiendo los valores de este arte marcial y ayudar a los practicantes en Madrid a desarrollarse como personas equilibradas.
Su escuela, o dojo (pronunciado “do- yo”) se especializa en Kenpo Kai, el arte marcial que Danilo practica. Tienen a más de 100 alumnos desde los 3 hasta los 60 años. A día de hoy cuentan con dos maestros para impartir las clases de Kenpo Kai: el propio Danilo y su alumno directo Jorge Pascual, quien fue uno de sus primeros alumnos y con quien le une una gran amistad por todo lo compartido dentro y fuera del tatami a lo largo de los últimos diez años, aunque a veces Danilo considera que ahora aprende él más de Jorge que al revés.
Danilo, ¿cuál ha sido tu trayectoria hasta fundar tu escuela de artes marciales?
Llevo haciendo artes marciales, en concreto Kenpo, desde que soy niño. Casi 25 años diría yo. Nací “ochomesino” y con bastantes problemas de salud. Mis padres tenían todo un plan de ataque, y además de las visitas frecuentes al hospital, y la medicina china, dentro del plan estaba el practicar artes marciales con el convencimiento de que me ayudarían a crecer como una persona fuerte, sana y equilibrada. De hecho, los “culpables” de todo esto de las artes marciales son mis padres, y nunca les estaré lo suficientemente agradecido.
Me mudé a España en el año 1999 y traté de continuar mi formación en las artes marciales. Anduve practicando en diferentes disciplinas, Judo, Sambo, Taichi… pero a pesar de estar unos años en Goshindo y en Taekwondo, no terminaba de sentir que era para mí.
Al empezar la Universidad, encontré un club de Kenpo-Kai. Coincidió en una época en que mi madre cayó enferma y en mi familia pasamos por una vorágine de cambios familiares y económicos, y descubrí que, una vez más, el Kenpo me proporcionaba un pilar en el que asentarme. El Kenpo-Kai, es una escuela de Kenpo tradicional japonés y en ella encontré una segunda familia.
En concreto, ¿cómo manejáis a los jóvenes para que no usen las destrezas que aprenden practicando artes marciales de una manera errónea y agresiva?
Además de que los valores inherentes a nuestra escuela y al Kenpo Kai subrayan el autocontrol, contamos con la ayuda de nuestro programa especial de “Senpais de Kenpo Kai”, en el que formamos de manera más avanzada a los alumnos adolescentes que se lo merezcan, los cuales están en edad crítica de desarrollo.
Les damos una formación más profunda en las artes marciales y les ayudamos a nivel competitivo para obtener becas deportivas. Son los que nos ayudan a impartir las clases infantiles, algo que les sirve también para adquirir valores de responsabilidad preparandoles para la vida laboral, además de ser un ejemplo para los alumnos más pequeños.
¿En qué consiste el Kenpo Kai? ¿Qué aporta a sus practicantes?
Kenpo Kai es un sistema de defensa personal muy eficaz en el que se trabaja no solo el combate de cuerpo a cuerpo en forma de golpes y patadas, sino agarres y proyecciones buscando desarrollar habilidades marciales en diferentes distancias y situaciones, para que ninguna situación o condición sea una desventaja. Aparte de la lucha se aprenden armas, meditacion, formas de medicina, rompimientos, etc.
El objetivo primario del Kenpo Kai es la búsqueda del equilibrio del practicante a través de nuestro arte marcial. A nuestros alumnos les enseñamos valores muy fuertes que se extrapolen a su vida cotidiana. Valores como la perseverancia y la auto-superación son importantes para lidiar con nuestra vida laboral, pero el compañerismo que existe en el dojo, el respeto , la igualdad de género, la ausencia de racismo es un ambiente que ayuda a sobrellevar los días duros, los conflictos familiares, las crisis de las diferentes etapas de la vida y eso son solo algunas de las cosas que se aprenden en nuestra escuela y en cualquiera de Kenpo Kai.
¿Dónde estáis situados? ¿Hay limitación de edad para entrar a recibir vuestros cursos?
Nuestro dojo está en la calle Agustín de Rojas, número 1 de Madrid capital. En él impartimos Kenpo Kai para todas las edades desde los 3 hasta los 60 años, de lunes a viernes.
Si alguien ha leído este artículo y le apetece probarlo completamente gratis, solo tiene que venir y decir que ha leído este artículo. Además, si se apuntan les regalamos unas espinilleras y unos guantes.
Kenpo Kai: una herramienta para la formación en valores
Danilo Jude Bardisa, campeón mundial en Kenpo Kai, imparte clases de este arte marcial en su Escuela de Artes Marciales. Explica Danilo que esta disciplina marcial se caracteriza por transmitir una serie de valores y responsabilidades que son extrapolables a la vida diaria. Por eso mismo considera que es una buena herramienta para mejorar la autodisciplina y el carácter a todas las edades, pero especialmente en los más jóvenes.