Atrapando la naturalidad del momento
La Fotografía permite guardar para la posteridad instantes y lugares únicos que seguirán existiendo en nuestra memoria gracias a las fotografías y el buen hacer de los profesionales que, con visión artística e implicación profesional y personal, se dedican a este arte. Como bien señala nuestra entrevistada, se trata de contar historias.Hablamos con Janire, una fotógrafa de 34 años residente en Amurrio (Álava) y dueña del estudio Jare Photography. Después de acabar el bachillerato artístico comenzó a estudiar fotografía y mientras estaba estudiando, un fotógrafo de bodas le descubrió este apasionante nicho en el que se especializaría, para volcar en el mismo su talento artístico y visión personal.Siempre buscando la naturalidad, para captar momentos reales y la esencia de las personas. Poniendo el acento, en las sesiones familiares, en que los niños se sientan a gusto y disfruten de las sesiones siendo ellos mismos. Con mucha ilusión y dedicación se consiguen fotos naturales que reflejan, de manera real y relajada, a las familias.
Janire, ¿qué implica para ti hacer fotografías naturales? ¿Cómo influyen tus gustos personales durante las sesiones de fotos?
Para mí lo más importante es que todas las personas que viven la experiencia de hacerse un reportaje de fotos se lleven un gran recuerdo. Cuando hablo de fotografía natural, además de los entornos en los que hago las sesiones, mi principal objetivo es captar la naturalidad de las personas. Fotografiarlos cuando se relajan, cuando se miran entre ellos y están a gusto con mi cámara delante. Cuando, por un ratito, se olvidan de que estoy ahí y son ellos mismos. Me refiero a una fotografía más real, lejos de posados de revista. Les digo que jueguen, que anden, que se abracen; lo que surja en cada momento para que sean ellos mismos y yo pueda guardarlo. Respecto a los gustos personales, intento ayudar a mis clientes en todo lo que necesiten. Los asesoro sobre vestuario, los guío y les digo qué colores van acorde a la localización o las tonalidades que funcionan mejor. Además, soy una consumidora voraz de fotografías de familia, bodas y naturaleza. Antes de ir a la sesión ya tengo pensadas algunas de las tomas en mi cabeza, en lo que se refiere a encuadres y luz. Si veo que mis clientes están cortadillos o no se han soltado delante de la cámara les ayudo, y les voy diciendo que hagan cosas que tengo pensadas (dale un beso, cógela en brazos, etc). El imaginario que guardo en la cabeza ayuda mucho en las sesiones, para que no nos bloqueemos. La verdad que las personas captan el mensaje y la filosofía de Jare.
¿Qué cámara prefieres utilizar para realizar fotos de familias y por qué?
Creo que es más importante el ojo que la cámara, pero es cierto que dedicándote a la fotografía, y sobre todo a bodas, tener un equipo que se adapte a todas condiciones lumínicas es importante. Cuando empecé mi andadura profesional tenía la Canon 6D, el color de esta cámara es sencillamente maravilloso y sigo llevándola a todas las sesiones, junto con uno de los objetivos fijos. A día de hoy, también trabajo con la Canon 5D Mark III y la IV. Valoro la calidad ISO de la Mark IV. Y sobre todo, trabajo con objetivos muy luminosos: 1,4. (35mm, 50mm, 85mm). Para la fotografía de recién nacidos utilizo también el 100mm. A todas las sesiones llevo dos cuerpos y dos objetivos. Antes de salir de casa, y dependiendo de la sesión, elijo el equipo que mejor se adapte a las condiciones.
¿Cómo es la relación que estableces con tus clientes cuando realizas fotos familiares? ¿Cómo adecuas tu estilo de fotografía a sus necesidades?
Normalmente tengo una cita previa para conocernos y enseñarles mi trabajo si no lo conocen. Aunque la mayoría me conoce, también es cierto que cada vez, la gente regala más sesiones, así que hay personas que llegan a mí por un regalo y no me conocían. Después quedamos el día de la sesión, en mi oficina o en la propia localización. Los reportajes suelen durar de 1 a 2 horas y la verdad que el tiempo pasa volando, solemos charlar, les doy consejos. La verdad que pasamos un ratito muy agradable disfrutando de las vistas y de su sesión de fotos. Mis clientes conocen mi trabajo, entonces resulta siempre fácil trabajar, conocen el estilo y además, les pregunto si hay algún tipo de fotografía que quieran en especial y voy a por ella. Con buena comunicación conseguimos los objetivos. Y por último volvemos a quedar, para ver las fotografías juntos en la oficina y para que reciban sus recuerdos en formato digital e impreso. Veo de suma importancia imprimir todas las fotos, para que las tengan en formato físico, ya que no es lo mismo que ver una foto en ordenador o en papel.
¿Cuáles son los tipos de sesiones fotográficas que ofreces?
A día de hoy, mi especialidad son las fotografías de familia y bodas. Realizo muchos reportajes con niños de todos las edades, desde recién nacidos a niños más mayores; sesiones con primos, nietos y abuelos. He de reconocer que son las sesiones que más me gustan, adoro a los niños.
La importancia de una relación de confianza con los clientes.
Crear vínculos de confianza con las familias con el objetivo de generar espacios relajados en los que las personas se sientan cómodas para expresarse libremente, es el secreto para lograr fotografías auténticas y naturales. A eso debe sumarse un adecuado conocimiento técnico, la utilización de herramientas adecuadas y una visión artística personal.