Tu terapeuta para manejar y superar un trauma
Beatriz Galván es Psicóloga, Psicoterapeuta, madre y gran apasionada de su trabajo. Aunque nació en Palencia, su familia tiene raíces madrileñas y Beatriz reside en Alicante desde niña. Su interés en la Psicología comenzó a los 13 años. Deseaba aprender más acerca del comportamiento humano, las emociones y el funcionamiento de la mente, y poder ayudar a los demás a manejar sus problemas.
Como tenía muy claro a qué se quería dedicar, cursó la licenciatura en Psicología y compaginó el trabajo en consulta con la terapia personal y la especialización en psicoterapia a través de másters y postgrados enfocados al área clínica y de la salud, con población infantil, juvenil y adulta. Sigue formándose y aprendiendo cada día.
A lo largo de estos años ha compaginado la consulta privada con el apoyo psicológico a niños y adolescentes en pisos tutelados, la intervención psicológica con pacientes oncológicos y familiares de pacientes en entorno hospitalario, la atención psicológica en cuidados paliativos y la formación a profesionales. Actualmente se dedica a la intervención psicológica con niños y adolescentes tutelados, junto a la psicoterapia infantojuvenil y de adultos a nivel privado. Asimismo, coordina el Grupo de Trabajo de Psicooncología del Colegio Oficial de Psicólogos de la Comunidad Valenciana/Alicante.
Beatriz, ¿cuál es tu área de especialización? ¿Qué modelos utilizas?
Soy especialista en psicoterapia (European Certificate in Psychology: Psychotherapy /EFPA) y psicóloga sanitaria. Parto de la teoría del apego, la teoría polivagal y la psicoterapia integrativa, y estoy especializada en el tratamiento del trauma a través de técnicas de neuroprocesamiento.
“Nuestras cicatrices son a menudo la apertura hacia nuestras mejores y más bellas partes”. (David Richo).
¿Qué es un trauma?
Etimológicamente significa “herida”. Se trata de una experiencia impactante en la que nos sentimos indefensos e incapaces de controlar lo que sucede, donde se produce un bloqueo en nuestra capacidad de procesar la información de manera adaptativa, de modo que no llegamos a integrar ese suceso. Así, la información relacionada con el trauma, con la herida emocional (las imágenes, los pensamientos, las emociones y las sensaciones) no se llegan a procesar y a integrar correctamente.
Es como si nuestro cerebro fuera un ordenador, que ante una experiencia traumática, impactante, se bloquea, y no conseguimos terminar de procesar y almacenar de forma adecuada esa experiencia en nuestra biografía. Esto puede sucedernos en la edad adulta, en la adolescencia o en la infancia, e incluso antes de aprender a hablar (lo que llamamos trauma preverbal).
Un trauma puede ser experimentado por nosotros directamente o podemos ser testigos de un suceso que le ocurre a otra persona y también vernos afectados por él.
Las experiencias difíciles en la infancia influyen en nuestro bienestar y en nuestra salud a lo largo de la vida. El estilo de apego de nuestros cuidadores nos proporcionará una base segura (o por contra insegura) para desarrollar o no la capacidad de hacer frente a las adversidades, e influirá en el modo en el que nos relacionamos con los demás en la edad adulta.
Dentro de las técnicas de neuroprocesamiento que utilizo en psicoterapia, llevo 11 años aplicando EMDR -Eye Movement Desensitization and Reprocessing-, técnica descubierta por la Dra. Francine Shapiro en 1987. Este abordaje es eficaz para intervenir ante traumas por hechos recientes o pasados, tales como abusos psicológicos o físicos, negligencia, duelo, accidentes, enfermedades, acoso escolar, acoso laboral…y ante diversos problemas como trastorno de estrés postraumático, ansiedad, depresión, fobias, problemas familiares y trastornos de personalidad. Estoy especializada en EMDR en niños, adolescentes y adultos.
A lo largo de mis 15 años de práctica clínica, mi formación especializada se ha centrado en la teoría del apego, la psicoterapia perinatal, la psicoterapia infantojuvenil, el mindfulness, las técnicas de neuroprocesamiento, la psicoterapia integrativa y diversos modelos -como Internal Family Systems o la terapia somática-.
Siempre parto desde el respeto y la aceptación incondicional a la persona, como ser único. Tengo la gran suerte de dedicarme a aquello que me llena y de poder aprender de cada niña, niño, adolescente y adulto que me permite acompañarle en su proceso.
¿Cuáles son las psicoterapias de última generación que ofreces? ¿Todas estas terapias pueden ser realizadas indistintamente con niños, adolescentes y adultos?
Trato de adaptarme a las necesidades del paciente, a su etapa vital y a su biografía, al implementar EMDR así como el Mindfulness y el Brainspotting. La intervención es diferente dependiendo de la persona, la edad y múltiples factores. Cuento con dilatada experiencia y especialización en la intervención con estas técnicas en niños y adolescentes, así como en adultos. En algunos casos también me apoyo en terapia somática y en el uso de biofeedback.
¿Qué elementos son imprescindibles en tu modo de trabajar en psicoterapia? ¿Qué no puede faltar?
La base es, para mí, la relación y el vínculo terapéutico con el paciente. Parto de la aceptación incondicional, la sintonía y el respeto a la persona junto a la que me encuentro. Trato de generar un espacio seguro en el que dar respuesta a las necesidades relacionales del niño/a o del adulto, siempre adaptándome a su ritmo.
Encuentro de vital importancia el trabajo personal previo en psicoterapia de cualquier psicoterapeuta que se dedique a ello. A mi parecer, esto es aún más necesario en el caso de las y los psicoterapeutas especializados en intervención en trauma y los que trabajamos con niños. Es decir, la psicoterapia individual previa del/la terapeuta, el abordar de un modo profundo la historia de apego y biografía del psicoterapeuta es en mi opinión básico, así como continuar con el trabajo personal y supervisiones a lo largo del ejercicio profesional.
“Lo que da a la psicoterapia su efecto transformador de las vidas de las personas es el enfoque del psicoterapeuta en las necesidades relacionales del cliente y la relación entre el cliente y el terapeuta”. Richard G. Erskine.
Terapia que ayuda a transformar tu vida
Beatriz Galván cuenta con una dilatada trayectoria que le ha valido la consecución de un sólido prestigio profesional. Fruto de su trabajo y del reconocimiento, a día de hoy, Beatriz asume las funciones de psicoterapeuta, junto a la formación de profesionales y la responsabilidad de coordinar un grupo de trabajo del Colegio Oficial de Psicólogos de la Comunidad Valenciana en Alicante.
Está especializada en el tratamiento de traumas y basa su atención al paciente en las terapias de más y mejor eficacia contrastadas científicamente. Beatriz acompaña al paciente en la transformación vital que necesita para encarrilar su vida y mejorar la calidad de esta.