Tu escudo legal en tus asuntos jurídicos
Ernesto Fuenmayor Mosquera, abogado en Arrecife, isla de Lanzarote en la provincia de Las Palmas, es un español (nacido en Caracas - Venezuela 11/11/1989 de ascendientes gallegos y canarios). Ernesto comenzó sus estudios universitarios en la Facultad de Derecho de la Universidad Santa María en Caracas, antes de cumplir la mayoría de edad.
Se graduó como abogado a los 21 años iniciándose en el ejercicio de la profesión en el departamento jurídico de varias empresas aseguradoras. En el año 2013, Ernesto se trasladó a España y cursó un MBA en Dirección General de empresas en la Universidad de La Laguna. El 23 de enero de 2015 obtuvo el reconocimiento de su titulación como Licenciado en Derecho en España, tras haber sido el único candidato en aprobar la prueba de aptitud en la Universidad de La Laguna en ese año.
Desde entonces, ha vivido y trabajado en Madrid y posteriormente se mudó por motivos personales a la isla de Lanzarote donde finalmente ha encontrado su lugar, una isla en la que quiere quedarse para siempre. Allí ha desarrollado su propia firma: Fuenmayor Abogados, un despacho de abogados donde realmente el cliente se siente importante y la atención es lo más cercana posible y sin barreras. Por ello, la inmediatez y la celeridad son sus principales valores.
Tratan en todo momento de mantener informados a sus clientes de cada asunto mediante un seguimiento minucioso tanto durante el procedimiento como con posterioridad a fin de garantizar la adaptación del cliente a su nueva situación jurídica, especialmente cuando se trata de asuntos de familia. El pilar fundamental es la confianza que el cliente deposita en ellos y consideran que en este compromiso es imprescindible la comunicación y el diálogo abogado-cliente tramitando los procedimientos de forma ágil y rápida aunque siempre con el rigor técnico y el detenimiento en el estudio que exige el ejercicio de la abogacía.
Aunque al principio fue un despacho unipersonal, el volumen de trabajo le llevó a contar con más personas incluso de otras disciplinas, buscando siempre ofrecer un servicio de calidad. Principalmente, su compañero Ayose Hernández y otros colaboradores que prestan soporte concretamente en los procedimientos que llevan fuera de la isla. Igualmente, cuentan con psicólogos, peritos médicos, arquitectos, pues entienden que una buena demanda se debe basar en un informe pericial cuando las circunstancias así lo aconsejan.
Para la gestión del despacho cuentan con personal administrativo, que en esta profesión es imprescindible pues a diario llegan notificaciones que hay que gestionar, así como una empresa externa que se encarga de la contabilidad, así como nuestro diseñador/community manager que se encarga de gestionar las redes sociales y las campañas que realizamos.
Aunque el despacho es multidisciplinar porque Lanzarote es una isla pequeña y por ende la geografía así lo exige, Ernesto se encarga de la parte de Derecho civil, laboral y familia, mientras que su compañero Ayose lleva más la parte de derecho penal, ya que tiene estudios especializados en esta materia. Pero lo cierto es que la buena respuesta que han tenido en los asuntos de derecho de familia de sus clientes ha repercutido en que actualmente sean referentes en la isla en este área del derecho, motivo por el cual siempre están profundizando en esta materia, manteniéndonos actualizados a través de la asistencia a cursos y seminarios, formando parte además de la AEAFA Asociación Española de Abogados de Familia.
Ernesto, ¿qué le motivó a hacer este trabajo?
Si me pregunta con respecto a mi vocación hacia el ejercicio del derecho, creo que he tenido la suerte de saber con claridad desde muy pequeño a qué me iba a dedicar, nunca me imaginaba haciendo otra cosa. Si la pregunta va relacionada con el derecho de familia, mi motivación es poder cambiarle la vida a un/a pequeño/a cuando consigues la guarda y custodia a favor del progenitor que más apto está o cuando cambias la vida de un padre que puede ejercer la paternidad a través de una custodia compartida, un régimen de visitas equitativo o conseguir una pensión de alimentos a un adolescente para que cubra sus gastos universitarios, entre otras. De cierta forma tenemos la capacidad de cambiar la vida de las personas y debemos actuar con mucha responsabilidad.
En Fuenmayor Abogados disponen de abogados especialistas en derecho de familia, ¿cuáles son las características del servicio ofrecido? ¿Qué valores inspiran vuestra actuación profesional?
Los clientes de familia siempre van con mucho miedo, porque en cierta forma te abren las puertas de su casa y te develan sus aspectos más íntimos. Hay que saber empatizar con el cliente e ir poco a poco. Nuestros valores implican la cercanía para ganarnos la confianza del cliente y, sobre todo, responder inmediatamente en el terreno jurídico. Les hacemos saber que no hay tiempo que perder y rápidamente nos ponemos manos a la obra, sobre todo en los asuntos de guarda y custodia, que desde mi punto de vista tienen prioridad absoluta.
¿Qué parte de tu equipo de trabajo es esencial como Abogado? ¿Hay algún elemento que nunca debería faltar y por qué? ¿De dónde saco algo así si soy principiante en derecho de familia?
Sin duda, utilizamos mucho Internet, el cliente hoy día llega a ti a través de este medio, no va a preguntarle a un vecino o a un conocido por un abogado, porque no quiere que se entere de sus problemas. Un elemento que nunca debería faltar en la relación abogado cliente es la hoja de encargo donde queden claras desde un principio las condiciones del servicio. Esto genera confianza y profesionalidad. También hay que consultarlo todo con el cliente y más en asuntos de familia donde las decisiones repercuten directamente en su vida cotidiana. Nos encanta hacer feedback y hacer al cliente partícipe del procedimiento, ya que esto, sin duda, también le genera tranquilidad.
En caso de impago de pensión de alimentos, ¿qué se puede hacer para exigir el cumplimiento de la obligación? ¿Qué gastos extraordinarios pueden ser reclamados?
Me gusta que me haga esta pregunta pues en este aspecto son varias las opciones que prevé nuestra legislación. Un impago de la pensión de alimentos es un incumplimiento de lo acordado, bien a través de un convenio regulador, bien a través de sentencia. De forma que, si no se cumple con dicha obligación, el progenitor custodio puede instar dos procedimientos: uno por la vía civil en relación a la ejecución de sentencia por impago de pensión de alimentos, donde se reclama no solo la cantidad adeudada sino también los intereses devengados e igualmente.
Una vez interpuesta la demanda, si el obligado al pago sigue incumpliendo, se podrá realizar a lo largo del procedimiento una solicitud de ampliación de la ejecución. Se trata de asegurar que el obligado al pago de una pensión de alimentos cumpla, dado que se trata de una deuda de valor y un derecho constitucional, el derecho de alimentos siempre estará asegurado y es por ello que la legislación contempla varias opciones para asegurar el mismo.
Dicho esto, existe otra opción y es la de accionar por la vía penal a través de la correspondiente denuncia. Existe un tipo penal específico relativo al impago de la pensión de alimentos, de forma que el impago de 2 meses consecutivos o 4 no consecutivos supondría la comisión de un ilícito penal por el que se podría reclamar. Aunque he llevado reclamaciones por impago de la pensión de alimentos por las dos vías, desde mi punto de vista es más efectiva accionar por la vía civil, pues solo a través de la misma se puede obtener el abono efectivo de las cantidades.
Lo que sucede en la práctica y lo que me comentan varios clientes, es que han tenido malas experiencias cuando han acudido a un abogado y les ha puesto una demanda ejecutiva (que sería la precisa para accionar por un impago de pensiones), pues comentan que ha sido un proceso largo y que en ocasiones no han cobrado. En este punto, lo preciso es no solo interponer la demanda sino estar pendiente del desarrollo del procedimiento; solicitar embargos de salarios o bienes, actualizar las cantidades reclamadas… Me siento orgulloso en este aspecto porque en la mayoría de procedimientos de ejecución que hemos instando, mis clientes ya han cobrado y en un plazo de tiempo no muy amplio.
En lo que respecta a los gastos extraordinarios, existe un amplio debate y a día de hoy no existe consenso en cuanto a cuáles sí y cuáles no. No obstante, la teoría nos dice que son aquellos gastos que no tienen un devengo periódico, es decir, que son imprevisibles y son sufragados por ambos progenitores por mitad; este podría ser, a modo ilustrativo el tener que realizar a nuestro hijo un tratamiento odontológico consistente en una ortodoncia.
Igualmente, si ambos progenitores están de acuerdo, se podrían fijar una serie de gastos como extraordinarios y reflejarlo así en el convenio regulador. Ahora bien, salvo que se trate de gastos extraordinarios urgentes, que pueden ser asumidos por un progenitor sin el consentimiento del otro en una situación de urgencia y aún así reclamar al otro la parte que le corresponde, en la mayoría de gastos extraordinarios se exige que exista consenso. En este punto es preciso tener en cuenta que es necesario comunicarlos al otro progenitor para que se puedan reclamar con posterioridad. Y, en caso de que, aunque se haya obtenido el consentimiento no se hayan abonado, se podrá instar una acción de ejecución de gastos extraordinarios.
También puede ocurrir que, pese a no haberlo comunicado, sea un gasto que no se puede asumir por un solo progenitor y si no consiguiese el consenso con el otro habría que instar un procedimiento de ejecución forzosa para que sea un juez quien decida. Lo importante es asesorarse con un profesional conocedor de la materia tanto en la fase previa de redacción del convenio regulador como con posterioridad.
¿Dónde está ubicado el despacho? ¿Qué canales de comunicación poseen para los clientes que requieren vuestros servicios?
Contamos con una ubicación inmejorable: el despacho se localiza en la Rambla Medular, en pleno centro de Arrecife y apenas a 2 minutos de los Juzgados, lo que nos facilita el trabajo enormemente; pues prácticamente a diario tenemos que acudir a los Juzgados bien sea por una vista o actuación que tengamos o a consultar sobre el estado de algún procedimiento. Con esto último somos muy escrupulosos, dado que obtener un buen resultado no solo depende de la actuación que se haga en juicio sino de supervisar el correcto desarrollo del procedimiento.
En relación a los canales son varios los medios con los que contamos, desde la página web, que por cierto hemos renovado recientemente e invito a visitarla, la cual cuenta con formulario de contacto online y Whatsapp Business donde estamos disponibles las 24 horas así como las redes sociales y diversos anuncios a través de los que se puede contactar con nosotros. Este es el espíritu de nuestro despacho: el ofrecer un servicio no solo de calidad sino inmediato, pues cuando tenemos un problema legal, lo que queremos es solventarlo lo más rápido posible y por ello entendemos que como profesionales es esencial el estar siempre disponible.
Profesionalidad y seguimiento riguroso de tus asuntos más sensibles
En Fuenmayor Abogados, despacho legal en Lanzarote, su fundador Ernesto Fuenmayor Mosquera y su compañero Ayose Hernández Arbelo, junto a un amplio equipo de colaboradores, abarcan las ramas del derecho más importantes y frecuentes a la hora de ser requeridas por los clientes. Sus defendidos y representados pueden contar con un seguimiento minucioso por parte de este bufete legal, que hace de la comunicación abogado - cliente uno de sus principios esenciales para lograr llevar a buen puerto los intereses legales de los clientes.